miércoles, 19 de diciembre de 2012

Espiritismo según Smart


Qué relación existe entre este capítulo del Superagente 86 y el temita, es un secreto que tengo con  los lectores de Diario de una princesa montonera (el libro).

sábado, 20 de octubre de 2012

No daré nombres, no insistan

Estoy muy triste porque me dijeron que iban a incluir mi libro en un seminario sobre chick-lit montonera y al final no.

Qué feo jugar con las ilusiones de una huérfana, eso es muy de villano literario. 

viernes, 12 de octubre de 2012

Buenos Aires Casa Esma

Estuve en Buenos Aires. Me enfermé. Vómitos y gripe. Cinco días en cama.
Fui a una radio y a la Esma. Me rebautizaron Princesa Peronista y Princesa Rusa. Respectivamente.
En la Esma hablé de fantasmas y estaban ahí.
Vi Infancia clandestina y Mi vida después. Tenía la esperanza de que Infancia clandestina no me gustara/conmoviera, pero no tuve suerte. Fui al teatro dispuesta a llorarme todo apenas la viera a Carla con panza y así fue.
Festejo las lágrimas como goles.


En casa hay un gato de una vecina que se pasa el día en nuestra terraza, dos lagartijas que habitan la zona de la parrilla y un insecto que sólo se encuentra en la pasionaria, que tiene las patas de diferentes colores y vuela como si estuviera sentado.
Cuando llegamos estaba en flor el jazmín chino, cuando nos fuimos comenzaba a florecer la pasionaria.
No hay cucarachas. En este diario no hay ni habrá nunca cucarachas, ventajas de la ficcionalización.


El día que hablé en la Esma -dije cosas muy sesudas en un congreso muy sesudo- era el aniversario del secuestro de Paty y Jose. Traté de no pensar, pero cuando leí "simbólicamente omnipresentes" se me vinieron encima, ellos y todos sus amigos.
Concluido el evento académico, fuimos caminando con Jota y mi amiga Ana hasta el casino de oficiales. No lo había visto en tres días de congreso pero estaba ahí, detrás de los otros edificios y de los árboles, fosforescente. Fuimos, lo miré de frente, se apagó hasta quedar como lo que es, una construcción más bien pequeña a la que le falta mantenimiento, dije algo así como: los recordamos y los queremos mucho, me di vuelta y me fui por la avenida Néstor. Ana tenía medio porro y lo fumamos debajo de la calesita de las Madres. Lloviznaba.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Puaj

¿Soy yo sola o a ustedes también el eslógan "Los lápices siguen escribiendo" les da muy U.C.R.?

sábado, 1 de septiembre de 2012

Apasionante paper, no te lo pierdas, próximamente en tu ex ccd amigo

El padre come uva verde y al hijo le duele el vientre.
Vos sos bosta nene nadie se acuerda de vos.

(Los murmullos, de Luis Cano)

Gracias Luis Cano, TKM!

viernes, 31 de agosto de 2012

Siempre muere Argentina

Estoy en Buenos Aires. Es viernes. Mañana sábado vuelvo a Berlín. Estoy en una casa vacía, como si fuera una casa recién levantada. Me avisan que se murió Argentina. Me doy cuenta de que no puedo tomarme el avión mañana, porque me tengo que quedar para el velorio y el entierro. Me alegro de haberla visto ayer, después de cinco años de no hablarnos. La recuerdo con bolsas con comida en las manos. Está Jota, que es mi novio. No vivimos juntos. Jota me dice: No me puedo quedar esta noche porque tengo pobres. Él hace alguna cosa solidaria con pobres. Le contesto: esta noche la pobre soy yo. Jota se queda conmigo. No estoy triste por la muerte de Argentina, estoy contenta de haberla visto por última vez.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Poco para celebrar

A mi gusto, las partes más logradas de este artículo son las que me dictó la Princesa Montonera.

lunes, 13 de agosto de 2012

Lo logré, soy la Boluda Alegre de los Derechos Humanos

Estoy teniendo unos días muy princesamonto.

Mucha prensa. Mucha entrevista. Me encantaría poder llevar la cuenta de las entrevistas que di en mi vida. Serían por lo menos cuarenta y capaz que sesenta o más, porque doy entrevistas desde que era escandalosamente pequeña. Oh, pobre princesita.

Emprendí este sinuoso camino de la difusión del libro con la firme determinación de no dar testimonio. Pero sucumbí. Y les voy a explicar cómo se dio esa seducción testimonial, ponele.

Se dio de la mano de algo que el señor Matías Castañeda ha señalado bien: esa fuerza con la que tira hacia el pasado la información nueva.

Periodistas*: Antes de empezar quería confirmar esto: tus padres fueron detenidos en operativos simultáneos el 6 de octublablabla...

(*No es error el plural, fueron varios los que me pidieron esta confirmación inicial).

¿Operativos simultáneos? ¿Qué operativos simultáneos?

Prinzessin im Exil: Sí, bueno, no, no fueron operativos simultáneos, en realidad muy bien no sabemos, según mis abuelos se llevaron primero a mi papá y después a mi mamá y a mí blablabla.

Y así arranco la entrevista. Mal, mal, muy mal.

De todos modos eso no es lo más importante, no es lo que me hace volver a escribir en este blog (porque transcribir sueños es otra cosa). Lo que quiero dejar por escrito en acto solemne es mi propósito de no responder Nunca Más la pregunta sobre el humor. Ver título de este post.

Señores periodistas: con todo respeto, me atrevo a contarles que me aburro soberanamente (que es como nos aburrimos las princesas) de escucharme decir siempre lo mismo. Los invito a leer entrevistas disponibles en este mismo blog (ACÁ) y citarme libremente con respecto a este punto. Espero siempre con ansias el resto de sus preguntas y les pertenezco en cuerpo y alma porque los necesito mucho mucho y prometo no ser como Silvina Escudero que ahora no va a Intrusos cuando triunfe en el firmamento de la farándula argentina.

P
M

¡Es todo con humorrr!

lunes, 6 de agosto de 2012

Para que se relaman los podridos

Estoy con un grupo de chicas -mujeres jóvenes-. Somos cinco o seis. Nos movemos. ¿Estamos huyendo de algo? Es de noche, está oscuro, vamos de a dos o de a tres de un lugar a otro y nos volvemos a encontrar, siempre a la intemperie, en una esquina o un patio. Una de las chicas lleva un cochecito. En el cochecito hay dos bebés, un varón y una nena. No sé si son sus hijos. Ella camina por un lado, yo por otro, cuando vuelvo a verla no tiene el cochecito. Nadie lo tiene. Otra me explica, resignada: Patricia se olvidó los chicos.
Los imagino junto a bolsas negras de basura. 

martes, 31 de julio de 2012

Lo que se hereda no se roba

Jota y yo vamos a la casa de Estela y su marido alemán S. en Berlín. En un momento nos quedamos solos en una habitación y Jota mete en la mochila el árbol genealógico de oro de S. Está en una caja de cartón plana, como las placas conmemorativas, y en ningún momento lo vemos, pero sabemos que es el arbol genealógico de oro de S. Lo robamos. Aunque yo no esté de acuerdo y proteste todo el tiempo, lo cierto es que soy cómplice. Andamos por muchos lugares con el árbol genealógico de oro en la mochila. Nos vamos de vacaciones a un lugar con mar con el árbol genealógico de oro en la mochila. Jota cree que podemos llevarlo a Buenos Aires y venderlo ahí. Yo pienso que es una locura. Sé que hay una denuncia policial, sé que si intentamos venderlo en Berlín nos van a agarrar, sé que es imposible que pasemos los controles aduaneros con eso. Empiezo a pensar cómo devolverlo, qué decirle a Estela, se me ocurren cosas inversímiles como "guardé un pulóver en la mochila y no me di cuenta de que adentro del pulóver estaba el árbol genealógico". Cuando estamos en la cola del detector de metales, en el aeropuerto, para volver a Buenos Aires, y Jota todavía con la mochila al hombro con el árbol genealógico de oro, me despierto.

lunes, 23 de julio de 2012

LUCHE Y VUELVE

Ahora es cuando se pudre todo públicamente con Gustavo y en 2013 VUELVO y nos enfrentamos en el Bailando. Vamos al teléfono y le gano con el voto de mi pueblo montonero. Después me reemplaza Belén Francese, vuelvo a Berlín y termino el doctorado. Wunderbar!

miércoles, 18 de enero de 2012

oculta quizá

La muerte de Marina Kogan tiene algo que nos parte al medio a su generación, a los que amamos la escritura, a la comunidad de los que pasamos buena parte del día jodiéndonos ojos y espalda frente a la compu. Maru es la primera de nosotros en partir. Siempre estaba ahí, del otro lado de la fibra óptica, leyendo con atención, alentándonos. Confieso que no entraba demasiado a su blog y ahora no puedo. Pero era cosa de todos los días su presencia acá, entre mis cosas. También conocí a la Maru material, su cuerpo pequeño, su sonrisa enorme, su voz tierna. Pero para mí su muerte es esto: escribirle y que no conteste, no poder leerla, en este mundo extraño que habitamos los que nos dedicamos a escribir y que no es tan solitario como parece. La vida sigue, la sigo narrando porque no sé bien qué otra cosa hacer con ella, y Maru falta.

"estoy acá. oculta quizá, pero estoy acá. de alguna manera". Fue de las últimas cosas que tuiteó. Me gustaría contarle que ahora estoy estudiando a los fantasmas y que su frase (casi) final tiene mucho de espectral y que hay fantasmas buenos y que si ella ronda por acá seguro que es de esos.

Quiero pensar que fue una promesa, que Maru sigue acá, oculta quizá, pero acá, de alguna manera. Que nos lee a todos y que sonríe.